Presentación

martes, 12 de abril de 2016

RUTA DE MERCAILLO



Domingo 10 de abril de El Portillo de Batuecas a La Herguijuela de la Sierra

PRESENTACIÓN:
Bajo la nieve, al abrigo de las cumbres que cierran Batuecas
Fotografía de Paco
¡Volvemos a Batuecas! Aún no han olvidado nuestros sufridos pies las pedreras que hieren (también) el paisaje del valle de Batuecas. Si en aquella ocasión entramos y recorrimos el desconocido occidente del valle, en esta ocasión conoceremos y saldremos de él por el naciente. El paisaje se nos muestra más agreste, escenario de rituales de los primeros pobladores, tendremos que buscar la puerta de salida hacia los pueblos que veremos a nuestros pies para poder recorrerlos: La Herguijuela y su haya, Madroñal y sus cerezos y Monforte y su fuente, donde saciaremos la sed.
Por el camino, los primeros susurros de la primavera, los robles comenzando a brotar, el agua y los mirlos poniéndonos la banda sonora...y los pueblos, con sus encantadores detalles tradicionales.

Colores. Descendiendo a La Herguijuela
Foto de Paco
CRÓNICA:
El título de la ruta, "De El Portillo a La Herguijuela", no se corresponde con la que teníamos programada: de El Portillo a Monforte, pasando por la Portilla de La Bejarana, La Herguijuela y Madroñal. Tuvimos que cambiarlo todo y en lo poco que coincidimos fue en el punto de partida, lo bueno es que ya tenemos ruta para otra ocasión, pues tendremos que hacerla, que el domingo fue totalmente imposible. ¿Motivo? la climatilogía adversa que tuvimos.
Como todos los domingos, las previsiones eran malas, ya estamos acostumbrados. Siempre se equivocan  y a toro pasado nos cuentan que “la borrasca se deslizó por el Oeste, sin afectarnos” y otras lindas excusas similares. Y el domingo no fue una excepción, también se equivocaron y en lugar de un “día ventoso, con algún chubasco ligero”, tuvimos “aviso de nivel amarillo debido a fuertes vientos de componente sur, con rachas de hasta 70 Kilómetros hora. Lluvias con probabilidad de fuertes chubascos acompañados de aparato eléctrico. Nieve a partir de los 1000 metros”. ¡Y El Portillo está a 1300…! por lo que al abandonar el autobús hacía fuerte viento, nevaba copiosamente y dominaba el paisaje una niebla bien cerrada: temporal de toda la vida, vamos.
El haya de La Herguijuela y su entorno
Foto de Paco
Suerte que tuvimos reflejos y le hicimos un formidable regate a la ventisca y en lugar de tomar el sendero que bordea las cumbres de la Halconera por su costado sur, lo hicimos a su resguardo por la ladera norte. Pero allí se quedaron la Portilla de la Bejarana, las vistas a Batuecas y al Meandro Melero, el Risco de los Altares… lo dicho, prometemos volver pronto.
Quien tenga la paciencia de leer esta crónica y no viniese con nosotros, pensará “animalitos, con ese día y por el monte,  hay que estar locos, vaya pesadilla”, pero fue todo lo contrario, al menos para quien esto escribe y quien le acompaña. Fue de esos días que hacen afición, que llegas a casa con la satisfacción de habértelo pasado estupendamente y de haber tenido un día especial, exprimimos al máximo lo que el día nos ofrecía. A ello ayudaron y de qué manera, las buenas gentes de la Sierra con las que tuvimos la suerte de irnos encontrando. Por orden de aparición, el primero fue José María, que regenta el hotel Antiguas Eras de La Alberca. Tuvo la gentileza de prepararnos el desayuno con mantel, bollería y cafés. La conversación la pusimos nosotros.
Restos del molino de La Herguijuela
Foto de Paco
Los responsables del Bar Ye-Ye, que nos tenían preparada una buena sartenada de la estrella de sus aperitivos, la jeta. Además nos pusieron en contacto con Rafa, el alcalde de La Herguijuela, quien amablemente nos cedió un local donde poder resguardarnos de la tempestad y allí poder comer. El Teniente de Alcalde, Nicasio, que además de llevarnos al estupendo espacio del que dispone el Ayuntamiento para festejos gastronómicos, las antiguas cuadras reconvertidas en bodega tradicional. Hablábamos de Nicasio, del que más de uno le estará eternamente agradecido, después de comprobar que se había molestado en encendernos la estupenda chimenea y tenernos el espacio bien caldeado. Imagináos cómo llegábamos, después de 10 kilómetros bajo el fuerte chaparrón.
Cerezos
Fotografía de Paco
Una vez saciadas nuestras necesidades con unas buenas cañas o vinitos de la tierra y los correspondientes pinchitos del bar Ye-Ye, nos abrieron sus puertas y nuestros sentidos Jesús Ángel y María. Regentan Soleae, una empresa pionera en la producción y distribución de aceite de oliva de nuestra Sierra. Participamos en una cata y decía que nos abrieron nuestros sentidos, ya que nunca había percibido el olor fresco del campo al acercarme a un recipiente con aceite. Toda una experiencia, al menos para mí.
Gracias, Nicasio
Fotografía de Paco
Después de comer al calor de Nicasio y del grupo de participantes, nos fuimos a hacer una visita de cortesía a otra institución de La Herguijuela: Juana. Buena conocedora de su tierra, de los frutos que ella nos da, con una filosofía de la vida envidiable, nos pudimos traer para casa un trocito de todo ello en forma de mermeladas, quesos, miel…
Y  por último, contaros que como buen grupo anárquico-asambleario, por aclamación y clamando al cielo que parase de una vez  de soltar agua sobre nuestras cabezas, decidimos llamar al autobús y dar así por terminada la jornada senderista. Al rato allí estaba dispuesto Miguel, nuestro conductor, que contento por irse un ratito antes a casa, nos devolvió a la gris vida sin lluvia de nuestras ciudades.

                                                                         Por cierto, ¿ya sabéis por qué califico la ruta  de “mercaillo”, no?

Bajo techo. Gracias Rafa.
Fotografía de Paco


Aquí tenemos las fotografías de Paco

Y aquí las que sacó Alberto durante el desayuno. El día no se prestaba a inmortalizarlo
Huertas de La Herguijuela por el atajo que comunica
 los barrios de El Castillo con el de La Iglesia
Fotografía, Paco
Homenaje a los fotógrafos. Paco
 Fotografía de Manuel Ameneiro



Desayuno en el hotel Antiguas Eras
Fotografía de Alberto






6 comentarios:

  1. ¡Qué envidia,cómo os lo pasáis!
    Saludos, Marta González.

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    1. Cuando quieras-puedas, ya sabes lo que hay.
      Saludos, Eduardo

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  2. Mal dia el que tuvimos el domingo compañero, a mi me toco llevar al grupo la Facendera. Arrolobos, Riomalo de Abajo, por los cortafuegos, pasando por el Meandro. Menuda chupa de agua, tuvimos que recortar la ruta un tramo, pero bueno al final acabamos comiendo en Riomalo, Un Saludo Eduardo

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    1. La verdad es que vaya año para caminar. Parece mentira que estemos en primavera con la nevada y ventisca que soportamos. Ahora, más agua, los ríos desbordados y los campos encharcados. Sufrida la vida del senderista y peor aún del rutero (que lo de guía no me gusta) ¿por qué no nos daría por el billar a cuatro bandas?
      Saludos, Eduardo.

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  3. Una jornada más inolvidable... todas las penurias del camino se nos olvidaron al ver una chimenea arder con unos buenos leños... ¡a ver quién se movía de allí!
    Muchas gracias Inés, Eduardo y Herguijuela y por supuesto gracias al fuego que nos secó y calentó (también contribuyeron los "vinitos") y gracias a Paco por las fotos que yo apenas me estrené.

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    1. Para mi las fotografías son mi memoria y vi tan mal la cosa en el Portillo, que dejé la cámara en el bus y me centré en la que se nos venía encima. Doy las gracias a Paco, a Manuel y a Alberto por devolverme mis recuerdos. Los guardaré.
      Saludos, Eduardo.

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