Domingo 19 de junio
A la Vera de Gredos. Gastrorruta
PROPUESTA DE ACTIVIDAD
Soportales en Cuacos de Yuste |
Se nos ha ocurrido una estupenda ruta paisajístico-deportiva-fraternal-ecologista-botánica-faunística-etnográfica-cultural-monárquica-histórico-artística-acuática-reposada-gastronómica-verata.
No desesperéis, que os cuento: nuestro primer destino será Cuacos de Yuste (conjunto histórico-artístico) para desayunar y conocer su casco antiguo y si es posible, adquirir su afamado pimentón. Caminaríamos por senderos hasta el Cementerio Alemán, creado en 1980 para reunir en un sobrecogedor lugar los fallecidos alemanes en tierras españolas de las distintas contiendas.
Garganta la Olla, Barrio la Huerta |
ALGUNOS DATOS DE LA VERA
Fuente de Cuacos de Yuste El agua, el gran tesoro extremeño. Fotografía de Alberto. |
Respecto a la arquitectura, resaltar lo que se conserva de la tradicional, alcanzando cinco pueblos la categoría de Conjunto Histórico Artístico, además de contar con uno de los monumentos más importantes de nuestro patrimonio: el Monasterio-Palacio de Yuste.
En estas solanas, pasó sus últimos días el gran Emperador Monasterio de Yuste Fotografía de Alberto. |
Y quinto de Alemania, hijo de Juana la Loca y Felipe el Hermoso, nace en Gante el 23 de febrero de 1500.
Su idea de una Europa unida le convierte en prototipo de gobernante renacentista. Pero la gota, y las continuas guerras con Francia, los turcos y los luteranos, le hacen adbdicar en su hermanoa fernando y en hijo Felipe II, retirándose en La Vera, en busca de paz y sosiego (y buenas viandas). Llega a Jarandilla el 12 de noviembre de 1556, alojándose en el castillo de su amigo el Conde de Oropesa, hoy convertido en moderno Parador de Turismo.
Monasterio de Yuste, en primer término, el Palacio de Carlos I Fotografía de Alberto. |
Finalizadas las obras de adaptación del Monasterio de Yuste para acoger a tan regio morador, en febrero de 1557 se traslada a su última morada, rodeado por los monjes Jerónimos, quienes le atienden su espíritu, su gusto por la música y su insaciable gula; muere de paludismo el 21 de septiembre de 1558.
REFLEXIÓN
Si el Emperador en cuyo reino nunca se ponía el sol, escogió este rincón cacereño para pasar sus últimos momentos de vida. Algo tendrá La Vera para merecer este regio último deseo.
Plaza de la Fuente de los Chorros, Cuacos de Yuste Fotografía de Alberto. |
CRÓNICA DE LA JORNADA
Para pasar un día de asueto, hay lugares cercanos con los que estamos familiarizados; pensemos en Las Arribes, las Sierras de Francia o Béjar. Luego hay lugares que para ir y volver en el día están demasiado lejos y no nos parecen lo suficientemente atractivos como para invertir en ellos un preciado fin de semana. Por poneros unos ejemplos, me viene a la cabeza Sanabria o Guadarrama. Esto es lo que yo creo que también le ocurre a la comarca extremeña de La Vera. Aunque paradógicamente, uno de los personajes más poderosos que ha habitado nuestro planeta, el Emperador Carlos I de España, V de Alemania y de Extremadura (por aquí es como se le conoce), no pensó como nosotros y eligió este tranquilo rincón ibérico, no para pasar un largo fin de semana; lo consideró el rincón ideal de su vasto imperio para pasar sus últimos días.
Buen lugar para tomar el preceptivo café Hotel La Abadía de Yuste, Cuacos Fotografía de Alberto. |
Si os dais cuenta, todas nuestras propuestas tienen como principal motivo el daros a conocer lugares y zonas donde podáis volver con los vuestros. Me encanta cuando os oigo decir que volvísteis a comer al restaurante de La Alberca que tan bien nos trataron a la hora del café el día de la nevada o que llevásteis a vuestra pareja a ver aquel pueblecillo perdido en la Sierra de la Culebra (Santa Cruz de los Cuérragos)... y por supuesto que también fue este el objetivo de nuestra excursión del domingo pasado: que volváis con más tiempo a bañaros en el magnífico Lago de Jaraíz, a las más apartadas pozas de las Piletillas, en Garganta la Olla; a pasear, tomar pinchos, comprar pimentón o cerezas por las calles de Cuacos o por las de Garganta la Olla; a dormir o comer en el paradisíaco hotel La Abadía de Yuste, donde tomamos café, o que por fin visitéis por dentro el Monasterio de Yuste, especialmente los que os quedásteis con las ganas de hacerlo el domingo, una vez que ya hemos conocido su precioso entorno. Ya nos contaréis, que la zona merece un largo viaje o mejor un fin de semana o incluso es buen lugar para abandonarse hasta que llegue la parca...
Pozas y cascadas de las Piletillas de arriba, Garganta la Olla Para tomar un referente para ver lo grandes que son, fijaos en los bañistas arriba, a la derecha. Fotografía de Alberto. |
Callejeando por Garganta la Olla Fotografía de Alberto |
Lo malo, cuando volvamos, será que allí ya no tendremos a Pilar para relatarnos (¡qué placer escucharla!) la leyenda de la Serrana de la Vera, ni a Mª José que nos haga reír, tampoco nos tronarán los oídos con las animadas canciones de Carlos, los detalles que nos enseña Alberto, las risas de la otra Mª José, ni la charla, ni la compañía, de Pablo, cármenes varias, Javier... buff, que somos muchos, daros tooodos por echados de menos!!!
Difícil cocinar para tantos y a contrarreloj |
PRÓLOGO
Lo que son las cosas. En el viaje de vuelta, el día nos despidió con una soberbia luna llena que ascendía por el lado derecho del autobús, recuerdo que lo hacía sobre la Serrota, allá en Gredos, a la vez que el sol, muy sonrojado, se escondía por el lado derecho, hacia la Peña de Francia. Este hecho nos ha dado las pistas para la próxima salida... siempre maquinando, esto es una gratísima droga que se consume en compañía.
Preparándonos para celebrar el fin de curso |
Para ver las fotografías de Alberto
Y las de Eduardo
Jaraíz, el Lago |
Fotografía de grupo junto a la Serrana de la Vera y con Garganta la Olla de fondo. Fotografía de Alberto. |
¡Joder, cómo os lo curráis! que si pueblos perdidos de Zamora, aldeas históricas portuguesas... y ahora, comida, chapuzón y visitas culturales ¡en la Vera! ¿Cómo lo hacéis?
ResponderEliminarUn besazo a los dos, sois unos cracks, Javier.
Me parece muy buena idea lo de terminar la temporada con comida y chapuzón en el Lago. Qué piscina natural más grande.
ResponderEliminarPues tenemos más piscinas naturales en la jornada. No puedo contar más.
ResponderEliminarSaludos y gracias por el comentario
Buenos días:
ResponderEliminarAyer fue la primera vez que salí con vosotros.
Quería daros las gracias por el buen día que pasé.
Muchas gracias a vosotr@s, Belén. Sin vuestro ánimo y bien estar, poco podemos hacer los que organizamos esto. ¡Hombre!, bien visto, también buscamos lugares distintos a lo normal y eso ayuda a disfrutar aún más.
EliminarSaludos Inés y Eduardo
Nos proponéis largas caminatas a mundos, para muchos de nosotros, desconocidos, y os seguimos encantados pese al calor, el frío, la lluvia, o lo que toque y además deseando repetir.
ResponderEliminarPara mi que 300 o 400 años atras, habríais ardido en la hoguera, por brujos.
Afortunadamente ese tiempo oscuro ya pasó y espero que este hechizo dure mucho, mucho tiempo más y podamos seguir descubriendo sitios maravillosos acompañados con gente tan extraordinaria como DeBotas.
Muchas gracias por las buenas jornadas pasadas y por las que, sin duda, vendrán.
Gracias, Alberto, en nombre de tod@s l@s Debot@s por tus ingeniosos comentarios.
ResponderEliminarNo había pensado en ello, habrá que tener más cuidado con la Santa Inquisición, que ahora utiliza millones de cámaras de seguridad y nos sigue fielmente en la red. Lo único, que han cambiado de nombre (mejor no mentarlo)
Por si fuera interesante para ustedes o sus compañeros de rutas, tengo publicado plantararboles.blogspot.com y yofrenoelcambioclimatico.blogspot.com (MENOS es MEJOR)
ResponderEliminarEl primero es un manual sencillo para reforestar, casi sobre la marcha, sembrando las semillas que producen los árboles autóctonos de nuestra región. Salud, José Luis Sáez Sáez.
Pues agradecemos infinitamente tu fantástica iniciativa e intentaremos sembrar el monte con nuestro paso.
ResponderEliminar