jueves, 28 de enero de 2016

VALLE DEL JERTE, LAS NOGALEAS

Domingo 20 de diciembre de 2015

El Valle del Jerte se encuentra entre dos cadenas montañosas dentro del macizo de Gredos: la Sierra de Tormantos al este (en el macizo central) y los montes de Traslasierra y sierra de Béjar al noroeste (en el macizo occidental de Gredos), donde se encuentra el punto más elevado de la región, el Calvitero cuya altura es de 2405 m. Estas dos sierras, pertenecientes al Sistema Central, constituyen sus límites naturales.
 La fisionomía del valle viene marcada por la existencia de una fosa tectónica, desarrollada a través del último tramo de la falla Alentejo-Plasencia, que sigue la dirección NE-SW. Tiene una longitud aproximada de unos 70 km, desde el puerto de Tornavacas hasta la desembocadura del río Jerte
La roca predominante es el granito, Hace unos 40 millones de años y a lo largo de la orogenia alpina se produjeron otro tipo de ajustes en las diversas placas Se forma el macizo de Gredos, con orientación E-W basculando de N- S formando la sierra de Béjar y el valle del Jerte.
Posteriormente las formas del relieve han recibido retoques propios de la influencia del glaciarismo en las cumbres y de las aguas de escorrentía en las partes más bajas. Los cursos de agua que descienden de las cimas, han contribuido al modelado de las laderas, formando profundas gargantas, que otorgan al valle su especial configuración.
El río Jerte nace en las faldas del Torreón, a 900 metros de altitud y en apenas 50 kilómetros pasa por Plasencia a 345, lo que nos da una idea de su accidentada cuenca. Así, los ríos secundarios o gargantas salvan este desnivel precipitándose en cascadas.
Las condiciones climáticas del valle del Jerte vienen determinadas por diversos factores que suavizan el carácter continental que le correspondería. La influencia del relieve y su orientación, influyen en los valores térmicos y pluviométricos. Los relieves montañosos actúan de barrera e impiden la penetración de corrientes de aire frío procedentes del norte, que a su vez contribuyen al incremento de los índices pluviométricos, favoreciendo las precipitaciones originadas por el ascenso obligado de las masas de aire húmedo, provocando así la condensación de su humedad y la posterior precipitación.
Las precipitaciones medias alcanzan los 1500 mililitros anuales, contrastan con los 365 de Ávila y se asemejan a los 1516 de San Sebastián. Como en esta zona los días de lluvia son más escasos, las precipitaciones son mucho más copiosas, así como las crecidas de los ríos.
Dos son las actividades productivas del valle: por un lado el turismo y con mayor relevancia el cultivo del cerezo.
Por esta razón, se ha tendido desde años a promocionar el turismo hacia este producto, relegando su principal atractivo: el agua. Y es lo que acabamos de explicar: su accidenada orografía, unido a su alto régimen pluviométrico, lo que favorece la proliferación de cascadas y saltos de agua: las Nogaledas, El Caozo, los Pilones, los Papúos son algunos de los más representativos.
El nombre del río Jerte, y por lo tanto también el de la comarca, proviene del árabe: Xerit, palabra que puede haber tenido dos significados: "río angosto" o "río cristalino". De esta forma antigua del nombre del río se ha tomado el gentilicio culto: valxeritenses , que se alterna indistintamente en su uso con los más comunes de jerteños, vallenses, o vallejerteños.
En el año 1186 el rey Alfonso VIII de Castilla funda la ciudad de Plasencia sobre un asentamiento anterior, para así garantizar y asegurar la posesión de gredos y del Valle del Jerte. Se establece la Vía de la Plata como frontera entre los reinos de León y Castilla. Estando el Valle de Jerte dentro de la órbita castellana al igual que la comarca de Plasencia.
Navaconcejo 2000 habitantes: La Localidad está enclavada a orillas del Jerte. Su urbanismo responde al típico ejemplo de pueblo-calle. La principal, o Real paralela al río, se abre con un artístico crucero. La calle, en parte asoportalada y con balconadas muy voladas. Destaca la iglesia del siglo XVI
Cabezuela del Valle 2341 Habitantes. Desarrolló su urbanismo desde un cerro en el que se fundó en tiempos medievales. Su enclave lo determinó la presencia del puente, de ascendencia romana. Más tarde su caserío fue descendiendo por la ladera hasta la orilla del Jerte, límite natural del caserío. Éste resulta muy pintoresco, con calles laberínticas, callejones umbríos que evocan su diseño medieval. Como el resto de poblaciones, contó con una importante comunidad judía y sobre su sinagoga se alzó la actual iglesia se San Sebastián

Las imágenes de 
Paco


Las fotografías de 
Alberto



No hay comentarios:

Publicar un comentario