RUTAVENTURA POR LOS POZOS DE PEREÑA

Domingo 11 de marzo

Parque Natural Arribes del Duero

Danza en el abismo.

Sí, has leído bien, hemos vuelto a cambiar la ruta para el día 11, esto es un sinvivir...

Deciros que la ruta que proponíamos a Aldeadávila, se puede realizar cualquier día del año, en cambio la que os proponemos al Pozos de los Humos, sólo cuando ha llovido previamente. Curiosamente hace una semana aparecía en los medios su imagen prácticamente seca, pero una semana de nieve y lluvia y parece que la próxima también, ha conseguido que su aspecto cambie radicalmente.

POR LO TANTO, PARA EL DÍA 11 PROPONEMOS UNA RUTAVENTURA A PEREÑA Y SUS POZOS. 
Serán 16 kilómetros y un desnivel acumulado de 600 metros de subida y 500 de bajada, vamos con un perfil cardiosaludable (de sube y baja continuo) también. Sí os decimos que no recordamos subidas ni bajadas especialmente fuertes.

La idea es salir de Pereña camino de la ermita del Castillo, que sólo veremos a lo lejos. Nos acercaremos al cañón del Duero, seguramente enrojecido por la arcilla que arrastra de los campos castellanos. Para llegar hasta él tendremos que ir un pequeño tramo campo a través, pues el cierre con alambrada de una gran finca ha cortado la sugerente senda que unía la ermita con el Pozo Airón. 

Será al doblar un recodo, cuando tengamos la primera visión de esta esbelta y bella cascada, que precipita las aguas del arroyo de Los Cuernos. Otra singularidad, es la posibilidad de poder pasar por detrás de la cola de caballo que forma, pero somos muchos y eso lo dejaremos para que vosotr@s lo hagáis otro día.

Para unir el Pozo Airón con el de los Humos, lo normal sería tomar las pistas que llevan a ambos saltos de agua, dando, eso sí, un tremendo rodeo. Nosotr@s utilizaremos imperceptibles sendas que siguen el escarpe del Duero, aquí viene lo de Rutaventura, pues resulta que no hemos podido hacer una "previa" para ir más decidid@s. Sí os decimos, que el Ayuntamiento de Pereña, realizó años atrás una ruta por estos mismos lugares.

Así pues,llegaremos al emblema del Parque Natural, el Pozo de los Humos, sin haber utilizado las pistas por las que el gentío va a ver el efímero espectáculo de agua, luz y sonido.

¿Y la vuelta al autobús? 

Cuando estuvimos por primera vez en El Pozo, allá por los años 80, había que dejar el vehículo en una explanada existente en la carretera a Masueco y orientándonos por las torres de las líneas de alta tensión. Sin demasiada dificultad, se llegaba hasta él, viendo previamente el Pozo de los Bueyes; pues eso haremos.

Lo dicho, quien quiera acompañarnos en esta primera rutaventura, puede hacerlo mandándonos un correo mañana día 6 a partir de las 16:00 horas SI NO TE GUSTA MOJARTE, LAS PREVISIONES A DÍA DE HOY, SON DE LLUVIA PARA ESE DÍA (más rutaventura). También os decimos, que si se confirmasen cambiaríamos el recorrido (una vez más), incluso llegaríamos a realizar una ruta alternativa entre pueblos (aún por decidir), para asegurarnos la comida a cubierto.

Escena invernal

Buena organización. Lástima de foto de las torrijas con las que acompañamos el café

Uno de los mejores momentos del día.

¡Vaya ánimo, con la que nos estaba cayendo!

Lluvia y viento, mala combinación.

Preciosa senda que desciende al Duero

Arroyo de los Cuernos antes de despeñarse en el Pozo Airón

Espino de los Cazadores.
Colores

Precioso mirador sobre el Duero

El Arroyo de los Cuernos en su busca del Duero.

En el centro El Pozo Airón, sobre éste el Pozo de la Botarata.

El Pozo Airón, espectacular

Interior del Pozo Airón.

Pozo de la Botarata, con la tristeza de su historia real.
A la izquierda, el grupo serpentea siguiendo la senda

No tuvimos problemas con el paso de regatillos, pero era uno de los posibles contratiempos.

Seguimos el curso del Arroyo de Los Cuernos

Un placer caminar por estos senderos

Puente tradicional que nos ayuda a atravesar el crecido Arroyo de los Cuernos.

A lo lejos, Pereña

Incipiente primavera

También hubo malos ratos...

...que pronto se olvidaron.

El Parque Natural Arribes del Duero forma parte de dos países, España y  Portugal; dos provincias Zamora y Salamanca y dos paisajes la llanura de la meseta castellana, con un clima continental y los cañones que ha labrado el caudaloso río Duero, donde la diferencia de altura, suaviza los inviernos. Al Gran Río le tributan a su vez otros grandes ríos como el Tormes, el Águeda o el Huebra así como decenas de pequeños arroyos con menor poder erosivo que se despeñan ladera abajo.

Pozo Airón es en realidad un conjunto de cascadas que forma el arroyo de los Cuernos en su vertiginoso descenso, de unos 300 metros al cercano Duero. Aparte de la elegante belleza del agua, el Pozo posee la particularidad de que detrás de la cascada el agua y el viento han erosionado una cueva en la que es posible introducirse, pero entrar en ella lo dejaremos para otra ocasión debido a las rocas  húmedas que hay en el mismo pozo y que estarán muy resbaladizas y un resbalón puede estropearnos el día. 

Curiosamente, un tramo de la cascadalo llaman pozo de la Botarata, pues en él se despeñó María la Botarata. La historia, desgraciadamente no es leyenda, y lo hizo debido un amor imposible en el contexto de la postguerra. El topónimo le viene porque el padre era el tío José el Botarata, que en estos pueblos los motes mandan más que los apellidos.

Pozo de los humos, cascada que forma el rio Uces, río que a su vez separa los términos de Pereña y Masueco. Tiene una caída de 50 metros, creando una de las cascadas más espectaculares de Europa. Para que os hagáis una idea de la magnitud de lo que tenemos delante de nosotros, las Cataratas del Niágara superan a las del Uces en tan sólo dos metros.

 Poco antes de caer al vacío, las aguas del Uces  se dividen, dando lugar por un lado al propio Pozo de los Humos y por otro el de las Vacas o de los Carros. Según la tradición oral por él se despeñó un carro tirado por vacas, que se encontraba cargando el trigo en el molino del que aún quedan claros restos y al que este verano era fácil acceder cruzando el escalofriante cauce seco.

 Debajo del Mirador en el que lo contemplaremos, se encuentra la Palla Rubia abrigo rocoso donde se conservan pinturas rupestres y que confieren al lugar un halo sagrado.

En el mismo anfiteatro, se encuentra la cascada de la Cribera, arroyo del mimo nombre que se despeña 300 metros ladera abajo, formando pequeñas cascadas a cada cual más sugerente.

Espectación

Espectáculo

Impresionante Pozo de los Humos.
A su izquierda asoma el Pozo de los Bueyes, de las Vacas o de los Carros

Detalle

Detalle artístico, efecto seda.

Aquí un tramo de campo a través.

Pero enseguida volvimos a nuestros queridos senderos.

Comida a resguardo en Pereña.

CRÓNICA

Efectivamente, el domingo realizamos la I Rutaventura oficial de DeBotas. Digo lo de "oficial" pues es norma de la casa el realizar algún tramo o alguna ruta sin saber previamente qué haremos. Pero este domingo, a excepción del Café Sorpresa, todo lo demás estaba en el aire.
Nuestra idea inicial era visitar únicamente el Pozo de los Humos, que si se quiere ver hermoso, hay que hacerlo después de días de fuertes lluvias, pero nos arriesgamos y nos lanzamos al Duero y al Pozo Airón, topónimo que le venía al pelo al día.

Precisamente al comienzo de la marcha fue de esos momentos en los que más llovía, pero el fuerte viento arrastró las nubes cargadas de agua y pudimos tener buenos ratos de tregua. Además, al descender, los farallones del Duero nos abrigaron de los molestos vientos.

Todo estuvo en paz y armonía, hasta el momento en el que tuvimos que tomar la pista que lleva al mediático Pozo de los Humos, que tras días apareciendo en todos los medios, no pararon de molestarnos los vehículos de los visitantes. Esta situación nos obligó a cambiar una vez más de planes y en lugar de volver a Pereña por esta concurridísima y peligrosa (por tanto coche) pista, lo hicimos por el primitivo acceso al Pozo, hoy en desuso, desde la carretera de Masueco. Aquí, los nervios del rutero (guía) estuvieron a flor de piel, pues aunque el GPS te orienta, caminar sin senda, con la amenaza de quedar atrapad@s entre escobas y con cincuenta y tantas personas detrás, sin comer, amagando la fuerte lluvia y no muy confiad@s en lo que allí ocurría, todos estos ingredientes juntos, hacían peligrar la integridad del osado aventurero. 

De nuestro lado estuvo la suerte de que la alta tecnología funcionase y nos pudiésemos poner en contacto con el dispuesto Miguel, nuestro conductor y así dar a tod@s la sorpresa de que estuviese el autobús salvador en el lugar acordado y en medio de la ruta. Así pudimos comer en Pereña a una hora adecuada, al calor de bares y hubo quien lo hizo en restaurante, que el día fue apropiado para ello.

Siempre se me olvida dar las gracias a unas personas que sin ellas sería casi imposible realizar estas rutas tan numerosas. Me refiero a Alberto, que con generosidad y paciencia envidiable, debe lidiar con fotógraf@s, recolectores/as, participantes que tienen que hacer sus necesidades imperiosas, y siempre con su sonrisa satisfecha cuando llega a nuestro lado, siempre va cerrando el grupo y en contacto con el guía.

IMÁGENES

Aquí podéis ver el reportaje de Paco

El trabajo de nuestro buen amigo Vicente

Espectacular vídeo del Pozo de los Humos de Beto Sangón

Aquí las esperadas fotos y varios vídeos de Alberto

Y por último las de Ángel, que se me habían traspapelado...